lunes, 8 de diciembre de 2014

A ti,desconocido.

Parecía que ya ni siquiera regresaríamos. Que nos habíamos ausentado para siempre, y que ni en sueños podríamos volver.
Lees esto como palabras dispares sin ningún rango de sentido. Pero para mí, si lo tienen.
Tal vez no uno concreto, o quizás sí, pero no lo he descubierto.
Cierro los ojos. Escribo esto sin ningún consentimiento, nunca lo he pedido y hasta ahora todo había salido bien. Será la última vez, estoy segura.
Ni siquiera sé muy bien porqué lo hago, no invoco una respuesta, tampoco la necesito.
Supongo que imagino que detrás de mi tan solo se oyen gritos, y al frente... un precipicio.
Imagino que se detienen a esperar como me fundo entre nubes esperando caer, y gritan. Siempre gritan, pero no avisaron.
Todavía no he escuchado un solo no. Hubiera bastado para detenerme. Ahora, sigo adelante.
Sin ningún motivo por el que hacerlo, pero no viajo sola. Nunca lo he echo.
Me acompañan silenciosos aquellos que temen no poder regresar nunca al inicio, pero aguardan tranquilos el final.
Me acompañan valientes, siempre en minoría.Aquellos que intentan adivinar el sentido des sus pasos.
Pero, ¿ y tu ? ¿ no viajas a mi lado? ¿ buscas encontrar algo o realmente tan solo quieres escapar de algo que amas?.
Jamás comprendí como rechazamos el destino, mientras los segundos se nos escapan de las manos.
Ya te lo he dicho, para ti estas palabras no tienen el menor sentido.
Pero sigues leyendo. ¿ Acaso esperas un final singular? ¿Un símbolo de odio compartido?
Tal vez busques algo inexistente, y encuentres en el él ese trozo de felicidad.
Creo que empiezas a entenderlo. No a mí, ni a ti, ni siquiera a la propia vida, pero empiezas a entender lo que digo.
¿Y sabes porque empiezas a entender lo que yo digo? Sencillamente porque lo he dicho.
Vas a dejar de leer, porque crees que he acabado, pero escucha.
Sí tú! Ese que nunca espera nada de nadie, que no comprende los porqués pero nunca busca respuesta. Sí, te escribo a ti, el que me ha enseñado todo sin haberlo conocido.
El que hoy ha dejado que le diga nada, y me ha entendido.
Te hablo a ti. Al que ahora va cerrar los ojos y a reír porque no le encuentra ningún sentido.
Pero escucha. A mí estas palabras me han servido para olvidar todo ese principio.
                                                                                                                                          Atte.Carmela

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Un abrazo de tu fiel enemigo